El uso de las aguas regeneradas es una de las estrategias básicas alentadas por la Unión Europea para mejorar el equilibrio hídrico entre la oferta y la demanda. En este contexto nace el proyecto REUTIVAR, “Reutilización del Olivar”, una iniciativa innovadora, pionera en Europa, que va a evaluar la aplicación de aguas regeneradas (aguas residuales tratadas y recuperadas) al cultivo del olivar en Andalucía.
El proyecto se propone, por un lado, optimizar el tratamiento de regeneración de aguas al uso específico del olivar, y por otro, desarrollar también un sistema de precisión de fertirriego (fertilización, más riego), ajustado también a este cultivo y al uso de aguas regeneradas. El objetivo final es impulsar el desarrollo sostenible del olivar andaluz mediante la mejora y adaptación a este cultivo del uso de aguas regeneradas, una de las estrategias básicas alentadas por la Unión Europa para gestionar los desequilibrios hídricos.
El proyecto está liderado por la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua), el Centro de las Nuevas Tecnologías del Agua (CENTA), la Universidad de Córdoba y la Comunidad de Regantes del Tintín. En él participan también, como colaboradores externos, la Consejería de Medio Ambiente, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, las empresas Regaber y Toscano Linea Electrónica, y la sociedad Aguas de Montilla, que gestiona la EDAR de Montilla, desde donde se sirve el agua depurada a la Comunidad de Regantes del Tintín. El proyecto incluye precisamente una fase de experimentación en esta Comunidad de Regantes, de la que se pretende extraer un modelo de riego sostenible del olivar.
Las condiciones hídricas de Andalucía, sometida a un déficit estructural, y la relevancia estratégica que tiene el olivar en nuestra Comunidad desde una dimensión social y económica, especialmente en el medio rural, hacen de especial valor este proyecto, que trata de aprovechar el entorno regulatorio favorable a las aguas regeneradas para propiciar un desarrollo sostenible del olivar andaluz basado en el mejor uso posible de estas aguas. Aunque no suficiente, el uso de aguas regeneradas es una alternativa no convencional de gran interés para mejorar la garantía hídrica, especialmente en el litoral andaluz. De hecho, de acuerdo con las recomendaciones de la UE, tanto la administración central como la autonómica están promoviendo en Andalucía el uso de aguas regeneradas para el regadío. El estudio se hace para el olivar porque representa el 55% de la superficie de riesgo de Andalucía y es clave para la vertebración social y dinamización económica del medio rural andaluz
Junto a la mejora en la garantía del recurso, el proyecto también persigue objetivos ambientales, pues la consecuencia ambiental más directa del déficit de disponibilidad de agua es la sobreexplotación de acuíferos. El uso de aguas regeneradas mejora por tanto el impacto ambiental del regadío. Asimismo, como el proyecto se orienta a mejorar el uso de los macronutrientes para la fertilización del olivar, pretende conseguir así un beneficio ambiental añadido.